Turquerías. Cosas de turcos, o, mejor dicho, cosas de El Turco, como se llamaba a los otomanos en la España que libró un pulso secular en el Mediterráneo con aquel Imperio que aunque en sus dominios sí se ponía el sol, estos se extendían por tres continentes. Aquel pulso duró hasta el siglo XVIII, cuando ambos imperios entraron en decadencia, paradójicamente al mismo tiempo, tras dos siglos pugnando por la supremacía en el Mediterráneo, el mare internum en el que España, sobre todo a partir del Tratado de Utrecht y la pérdida de las posesiones italianas, fue cayendo en la irrelevancia absoluta.
Los enfrentamientos militares, sobre todo navales, en particular entre galeras, apresamiento mutuo de esclavos, intercambio de cautivos, galeotes cristianos en las galeras otomanas, galeotes islámicos ―junto con delincuentes comunes ― en las españolas, fueron cesando paulatinamente. El Turco se empezó a considerar como una representación lejana, del…
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